Estuvimos de escapada un par de días en Guadalest, y después de ver la puntuación, los comentarios y fotos de la casa me pareció el regalo perfecto para el cumple de mi pareja. No decepcionó en absoluto.
Ya antes de ir Toni y Sofi te explican cómo llegar, dónde aparcar para no tener ningún problema y desde que llegas sientes que estás como en casa. Las estancias comunes son cálidas y acogedoras y la habitación estupenda, tanto el tamaño de la estancia, del baño, de la cama, todo limpio y sin faltar ningún detalle (encima por el cumple nos hicieron el detalle de darnos una habitación superior, ¡mil gracias!).
Estás arropado durante toooda la estancia, ayuda y consejos de rutas de senderismo, dónde comer... todo; para cualquier cosa se prestan a lo que necesites.
Y la cena espectacular (¡Sofi está hecha toda una chef! ¡y camarera es noche!) con productos de la zona, todo buenísimo, como también el desayuno en la terraza al sol (no te quedas con hambre, seguro).
Volveremos, que de hecho mis padres irán en breve por recomendación nuestra.
Trato inmejorable, sin duda.