Da gusto poder encontrar a profesionales de la hotelería y restauración que aún se afanen en dar un servicio realmente diferenciador y exclusivo, pero con un trato cercano y muy humano. Sin duda Sofía y Toni son máximos exponentes de esos profesionales carismáticos e implicados en su negocio, que realmente disfrutan ofreciendo la mejor experiencia posible a sus clientes. El hotelito es encantador, confortable y con gran personalidad. La cocina, tradicional e innovadora a la vez, primando el producto autóctono y todo acompañado de un trato muy cercano, que conjuga a la perfección la experiencia gastronómica con la historia del pueblo y de la comarca. En definitiva, absolutamente recomendable para descubrir o redescubrir esta joyita de la provincia de Alicante que es el Castell de Guadalest. Cases Noves, un 10!! Muchas gracias a los dos.